–¡Qué felices somos! ¡Cuánto nos queremos!
Se decían el uno al
otro, a cada instante, mirándose a los ojos. Sólo para asegurarse de que
ninguno de los dos se había soltado del cepo.
Lo más difícil en literatura es hacer una descripción, es decir, relacionar, poner con naturalidad, si puede ser con gracia, un hombre en un paisaje.//J. Pla. Madrid 1921.Un dietario.
Suelo ser un hombre bastante distraído, es decir, concentrado en cosas subalternas, y lo que ocurre a mi alrededor hace una marca muy débil en mi memoria. Tomo notas pues, para enterarme de lo que pasa. Lo sorprendente es todo lo que uno encuentra en esas notas que ni siquiera llegó a sospechar que estuviera ocurriendo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario